17 Feb Hacia un proceso de cambio político en Colombia 2022
Por. Lenin Ferney Patiño Gutiérrez
Consejero Político Local Tunja
La estructura social genera un proceso de organización que se consolida en las diferentes corrientes del pensamiento humano. Estos patrones relativamente estables y perdurables han existido en el transcurso de la evolución de la vida, aquellas relaciones sociales que mantienen el armazón básico de lo que llamamos sociedad. Una de esta grandes corrientes teóricas la sustenta el “sistema económico capitalista”, premisas que conllevan a la desregulación estatal, mayor libertad de mercado y, en muchas ocasiones, privatización. Imponer el desempleo para justificar un modelo de contratación y seguridad social más injusta es la lectura de algunos críticos. La promoción del crecimiento a través de la liberalización del mercado y de la flexibilización del salario es la manera más colosal para reducir la pobreza. En cambio, los partidarios de “Cambur” sostienen que sin la redistribución de la renta no es posible el desarrollo de la economía.
Este modelo económico es aplicado particularmente en los campos de la salud, la educación y los servicios públicos. En estos, los privados se fortifican económica, jurídica y políticamente a partir del plan de apertura, para así poder exonerar las prestaciones de estos servicios en manos de empresas privadas, monopolios y particulares, a través de la desregulación del papel del Estado en los servicios. ‘’Al atravesar las diferentes etapas de transformación, el ser humano evoluciona. Al satisfacer necesidades básicas, la estructura social lanza a los individuos a los diferentes roles’’. Como impulsadores y ejecutores de grandes acontecimientos, hemos aportado a la construcción de la historia de la humanidad, papel transformador en el ciclo de la vida. Por ello, debemos participar activamente en estas elecciones 2022 en Colombia; poder elegir un verdadero gobierno al servicio del pueblo y de sus necesidades, romper el abstencionismo, ganar las mayorías democráticas y pluralistas en el Congreso de la República es poder ser protagonistas en la historia de construcción de sociedad. En Colombia están dadas las condiciones y es el momento histórico para un cambio de gobierno en estas próximas elecciones, poder elegir y ser elegido un gobierno de transición, una apertura a un gobierno democrático y lograr definir a corto y a largo plazo sólidos objetivos para superar las dificultades que se presentan al transcurso del tiempo.
Las personas usan la estructura que heredan para organizar y continuar sus vidas. Al mismo tiempo, los cambios en la estructura social pueden obligarnos a adaptarnos. El debate y la pluralidad de ideas se manifiestan en procesos organizativos, ya que la discusión de puntos de vista es lo que nos hace más humanos, diferentes y sobre todo “seres sociales”. Debemos observar que la interacción y discusión es el camino para encontrar nuevo conocimiento. El pensador “Aristóteles” señalaba que la actividad es un movimiento del ser hacia la propia ‘’entelequia’’: su estado de perfección. Es por esto que debemos plantear interrogantes, para así no caer en el conformismo.
Una de las formas que ha tenido el ser humano para transformar el pensamiento es a través de las experiencias de la vida, como el legado histórico que consolida y que ha dado pauta para crear resultados actuales, aspectos que han aportado al desarrollo de la humanidad. En sí, lo que se plantea es esa búsqueda de la realidad, de descifrar el problema entre el ser y el pensar. Lo que sí se necesita es una mente abierta, un espíritu explorador, una actitud crítica dispuesta a preguntarse aspectos de la realidad. ¡Las reformas de tipo académico y administrativo están en proceso!, pero ¿nos hemos interesado en lo más mínimo por lo que sucede? Ante esto, no debemos ser simples espectadores en el transcurso de la historia o ser instrumentos de fácil manipulación.
El estallido social se vio reflejado en los últimos paros y movilizaciones nacionales en el 2021. En un país tan rico como Colombia, debería haber para todos, no en manos de unos pocos. El despertar de la conciencia, producto de la desigualdad social y el inconformismo, se reflejó y seguirá despertándose a medida que avance la desigualdad social. No hay empleo, existen miles de jóvenes sin estudio y profesionales sin ocupación, se ha encarecido la canasta familiar, hay alza de los impuestos, falta salud de calidad y óptima. Otros problemas sociales afloran. Por ello, debemos converger y seguir trabajando para construir una propuesta para el país, que recoja el sentir de las mayorías, que sea de izquierda democrática; una economía y una política nacional que rechace y luche por derrotar el neoliberalismo y la globalización, contra las reformas tributarias, laboral y pensional que solo ha traído despidos masivos, pérdida de estabilidad laboral, una serie de injustos impuestos nunca retribuidos en salud, educación, vivienda, soberanía alimentaria para todos. Una sociedad diferente que sea educada, equitativa y justa, ligada al valor de la igualdad. Buscamos una sociedad próspera donde las libertades democráticas se puedan ejercer y donde exista realmente una soberanía nacional.
Tunja, Boyacá, 17 de Febrero 2022