“Insistimos en la importancia de garantizar un proceso exitoso de reincorporación. Desconocer lo acordado en materia de reincorporación, además de representar un incumplimiento flagrante de los acuerdos, puede constituirse en factor de reciclaje de nuevas formas de violencia”
Durante los días del 6 al 8 de abril de 2018 nos hemos reunido en la ciudad de Bogotá, más de 140 delegados y delegadas de los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación y de Nuevos Puntos de Reagrupamiento, con el propósito de realizar un balance de nuestro proceso de reincorporación integral a la vida legal. Tras escuchar los informes de cada una de las delegaciones y de realizar los intercambios y análisis correspondientes,
Declaramos
1.- Reafirmamos nuestra voluntad de continuar contribuyendo a la construcción de la paz y la reconciliación y de empeñar nuestros esfuerzos presentes y futuros porque lo convenido sea cumplido a cabalidad. Tenemos la convicción de que la implementación material del Acuerdo Final cualifica la organización democrática de la sociedad y abre senderos de justicia social.
2.- El proceso de reincorporación, visto de conjunto, se encuentra en una manifiesta situación de precariedad y amenaza con fracasar si no se toman medidas urgentes que permitan su reorientación a fin de generar las condiciones para una reincorporación colectiva e individual exitosa. La respuesta del Estado frente a la reincorporación transita los caminos de la burocratización excesiva, la ineficiencia, la indolencia, las trabas recurrentes, la falta de voluntad política y la muy notoria insuficiente capacidad institucional.
3.- La vida en la gran mayoría de los Espacios Territoriales y Nuevos Puntos de Reagrupamiento se caracteriza por la inexistencia de condiciones dignas de salud y salubridad, vivienda y servicios públicos, inseguridad alimentaria, ausencia de economía propia; a lo cual se adicionan problemas de documentación y acreditación de pertenencia a las FARC, de acceso al sistema financiero y los obstáculos a la organización de c ooperativas y los bloqueos en el sistema bancario. Además de que aún tenemos más de 623 prisioneros de guerra. Reconocemos avances importantes en materia de educación. Los mayores logros alcanzados han sido en su inmensa mayoría el resultado del esfuerzo propio y de esa voluntad férrea que traemos desde los tiempos de la guerra.
4.- Es preciso adelantar un “plan de emergencia” para darle solución efectiva a los problemas más urgentes de los Espacios. Urge la elaboración y puesta en marcha del Plan Nacional de Reincorporación. Esperamos que el Consejo Nacional de Reincorporación responda con acciones efectivas y con celeridad a estos requerimientos. La condición indispensable del proceso de reincorporación es el acceso a la tierra. El encuentro reclama la urgente adjudicación de tierras para los y las excombatientes, hoy campesinos y campesinas sin tierra. Ya existe jurídicamente el Fondo de Tierras; sólo falta la acción diligente del Gobierno.
5.- Todos los dineros del posacuerdo y particularmente los destinados a la reincorporación deben asignarse de manera directa y sin intermediación alguna a los Espacios Territoriales, las comunidades de exguerrilleros y exguerrilleras que los habitan o a sus organizaciones solidarias. El precario estado de la reincorporación demanda celeridad en la aprobación de los proyectos productivos, sean éstos individuales o colectivos.
6. Agradecemos a la comunidad internacional y a la cooperación, a la Segunda Misión de Naciones Unidas, a la Unión Europea, en particular a los Gobiernos de Cuba y de Noruega, así como al PNUD, su demostrado compromiso con la reincorporación integral. Su decidido apoyo ha sido y será fundamental para transitar el muy difícil camino de esta nueva etapa de nuestras vidas.
7. Insistimos en la importancia de garantizar un proceso exitoso de reincorporación. Desconocer lo acordado en materia de reincorporación, además de representar un incumplimiento flagrante de los acuerdos, puede constituirse en factor de reciclaje de nuevas formas de violencia.
PRIMER ENCUENTRO NACIONAL DE LOS ESPACIOS TERRITORIALES DE CAPACITACIÓN Y REINCORPORACIÓN
Bogotá, D.C., 8 de abril de 2010
