La última fase de la larga lucha por la total y definitiva independencia de Cuba fue liderada por esa inigualable generación de valientes y visionarios encabezados por Fidel, El Che, Camilo, Raúl, Abel, Vilma, Aidé, Ramiro, Frank y una larga lista de hombres y mujeres que, al lado del pueblo y con él, dieron vida a la guerrilla de la Sierra Maestra y aportaron a la organización de estudiantes, jóvenes, obreros, campesinos, capas medias, intelectuales como fuerza incontenible para allanar el triunfo contra la dictadura de Fulgencio Batista.
La correcta lectura que hiciera Fidel y la Dirección Revolucionaria del momento histórico que vivía Cuba en aquel momento: brutal dictadura, represión generalizada, discriminación, falta de soberanía, negación de elementales derechos al pueblo, entre otros, dio como resultado la elección de la lucha armada como la forma principal que debía confluir con la insurrección popular.
En un tiempo récord Fidel y los suyos pasaron del asalto al cuartel Moncada, a ser masacrados algunos, otros a la cárcel y casi todos al posterior exilio en México y luego el retorno en el Barco Granma y el desembarco, gesta que la memoria colectiva del ser cubano jamás olvidará, y por fin ese fulgurante primero de enero de 1959, en cuya espesa noche la estrella solitaria de la bandera de Martí iluminó el cielo de la Isla, de nuestra América Mestiza y del mundo. El sanguinario Batista ha huido bajo la fuerza de las armas de la guerrilla y el peso del pueblo en las calles.
El júbilo es generalizado, termina una era en Cuba y nace otra que dignifica al pueblo, acaba el analfabetismo, el desempleo, reparte la tierra entre campesinos con poca o nada, nacionaliza y confisca empresas extranjeras y nacionales que no respetan el nuevo orden, los valores colectivos priman sobre los individuales, la sana emulación y las verdaderas oportunidades se abren por igual a todos. La salud, el techo y los servicios públicos abarcan a todos los pobladores. Se acaba la esclavitud asalariada.
Cuba se convierte en honor, dignidad, solidaridad internacionalista, ejemplo para los pueblos del mundo.
Cuba salta de lucha patriótica y nacionalista a Revolución Socialista. El imperio y la reacción continental se dan a la tarea de estrangular la naciente sociedad; atentados contra Fidel y otros dirigentes, sanciones comerciales que avanzan al infame bloqueo, guerra bacteriológica, comercial y financiera. Todo se ensayó y todo fracasó.
Hoy Cuba resiste orgullosa, mientras el imperio entra en agonía prolongada y nuevas potencias emergen para reconfigurar el mundo del futuro.
Nosotros, colombianos del Partido Comunes, rendimos tributo de admiración y respeto al Pueblo, al Partido y al gobierno de la República Socialista de Cuba, agradecemos lo que han hecho apoyando la paz para nuestro país y les decimos que siempre estaremos prestos a brindar nuestra solidaridad. Aprovechamos para dar la bienvenida al nuevo embajador, compañero Javier Camaño y al nuevo cuerpo diplomático que llega a iniciar labores después del cambio por tiempo cumplido de sus anteriores compatriotas. Bienvenidos compañeros cubanos. Un fuerte abrazo en este 62 aniversario de haber roto las cadenas de la opresión.
Consejo Político Nacional Partido COMUNES
Bogotá, diciembre 31 de 2021
